Ca Rakel

Ca Rakel tiene sello propio, tanto por el espacio como por la comida. Rakel le ha impreso su estilo a todo el lugar. 

Los platos de la carta se salen de lo habitual, los bocadillos están pensados, elaborados, cada uno de ellos es diferente y original con algún elemento a destacar. Tiene muchas referencias con carne de caballo, aunque también puedes encontrar secreto ibérico o pollo. En su carta no encontrarás una tortilla de patatas pero sí un buen morro frito o una oreja a la plancha picante. Nos contó que le gusta innovar y jugar con los sabores cogiendo e inspirándose en platos que va probando en sus viajes dentro y fuera de España.

Carta

El horario del local también se sale de lo común, únicamente abre entre semana y su oferta es la misma desde las 9 de la mañana hasta las 15h, es decir te puedes tomar el mismo bocata para desayunar, almorzar o comer. A las 16h se cierra la cocina y a las 16:30h el local. 

A las 9h el local ya está lleno, echadle un ojo a la sección de curiosidades al final del post si quieres saber con quién te encontrarás si vas a Ca Rakel a almorzar a esas horas.

Y si queréis un consejo: Reservad si queréis hacer un buen esmorzaret.

El Espacio

El espacio es pequeñito pero muy bien aprovechado. A mí, particularmente, me recuerda a un chiringuito de playa, con muebles envejecidos de tonos azules y blancos, en general se respira un rollito a verano.

Tiene varias mesas dentro y fuera. Yo siempre me he sentado fuera, calle tranquila y agradable.

El Esmorzaret

Hacer un resumen de este almuerzo no es tarea fácil, he ido en dos ocasiones y todo lo que he probado ha estado muy bueno. 

He probado sus croquetas, torreznos, morro, oreja, cremaet y varios bocatas. Si solo pudierais ir una vez en vuestra vida os diría que probarais su morro frito, el bocadillo de cachopo con crema gorgonzola, el de brascada o el de Valencia almuerza con su salsa ahumada. Todos ellos con carne de caballo.

El morro es una maravilla, bien frito, no aceitoso, crujiente por fuera y tierno por dentro. Éste y el del Bar Trópico son mis favoritos.

Morro frito

Su oreja a la plancha es de sabor intenso por el adobo y con un toque picante (el rollito picante no lo he visto en ningún otro lado).

Oreja a la plancha

En cuanto a los bocatas, diría que el de Cachopo es uno de sus imprescindibles, básicamente porque no lo vas a encontrar en ningún otro lado y porque está brutal. El cachopo es de carne de caballo muy finita, jamón serrano y queso fundido que regalima en cada mordisco, le acompañan unas patatas fritas. Si eres de los que lo dan todo cuando almuerzas: lo puedes coronar con uno o varios huevos fritos.

Otro imprescindible es el bocata ideado por Bernar de @valenciaalmuerza: Carne de caballo, filamentos de cebolla, patatas, bacon y salsa secreta con un toque ahumado. Inicialmente este bocata llegó para estar una temporada pero ya se ha hecho un hueco definitivo en la carta.

Bocata de Valencia Almuerza

Otro que me encantó fue el de brascada de carne de caballo. Con este bocata @almorsar_et y yo coincidimos plenamente. El tomate rallado, el jamón serrano junto con la cebolla pochada le dan una frescura adictiva a cada bocado.

Bocata Brascada

En mi última visita también probamos su propuesta para el concurso del bocata de la Terreta. Un bocata diferente, original y dulce a partes iguales. Si te mola el dulce en los bocatas tienes que probarlo, su cebolla caramelizada en horchata contrasta con la crema gorgonzola. 

Bocata de la Terreta

A la hora del café Rakel también tiene cosas guays, además del cremaet puedes finiquitar el almuerzo con un Asiático: Leche condensada, cremaet de ron, crema de leche, café, canela y granitos de café.

Curiosidades

A primera hora está lleno de Policías, pero cuando digo lleno es que no cabe ni un alfiler. Como he dicho antes, el local es pequeño y si no reservas lo más probable es que no tengas mesa y tengas que esperar a que se libere alguna.

Nos vemos en los bares

Hay propuestas que me parecen súper interesantes tanto por el enfoque como por como se percibe la esencia de quién lo regenta. En este caso Rakel le imprime su sello y su personalidad, tanto al espacio como a todos los platos.

Me parece súper valiente y honesta la propuesta de Rakel, tanto por las referencias en carta como por los horarios que tiene el espacio.

Rakel

Por más propuestas como ésta y por más proyectos impulsados por gente joven y con ganas. Os dejo otros locales descubiertos en 2022 y que lo están petando.

La Chata

La Chata ya llevaba varios años en el barrio, con lo que se podría decir que no es nueva pero lo que sí se puede afirmar es que ha evolucionado. Ha pasado de ser una tienda de ultramarinos ubicada en los puestos exteriores del Mercado de Ruzafa a convertirse en un restaurante con desayunos, almuerzos, comidas y cenas sin perder su esencia y productos de ultramarinos.

La Chata Ultramarinos

Clarisa y Sergio vienen del mundo de la hostelería, la pandemia les hizo replantear su negocio y apostaron por un ultramarinos, tras varios años han decidido unir ambos universos creando un espacio dónde conviven el restaurante y la tienda.

Sergio y Clarisa

El concepto me parece brutal porque tanto te puedes pedir un bocata/plato de su carta, como que puedes pedir que te descorchen un vino o ponerte fino a conservas y latas gourmet. 

El Espacio

El local se encuentra en el número 4 de la calle Literato Azorín casi en la esquina con calle Cádiz. (Mapa Esmorzaret)

Terraza

Es un local pequeño, acogedor y con un estilo rústico el cual se va abriendo a medida que vas entrando, tiene mesas altas (de esas en las que apetece tomarse un vino con un buen queso), mesas bajas, un patio interior y una terraza en la calle con varias mesas.

Las fotos antiguas de las paredes no son solamente para decorar, si queréis saber un poco más echadle un vistazo a la sección de curiosidades del post.

El Esmorzaret

Os tengo que reconocer que ya he ido varias veces, aún no he probado toda su carta de bocadillos pero me quedan pocos. Cada vez que voy me pongo nervioso y fino también, hasta la fecha todo lo que he probado ha estado muy bien. Creo que mis nervios disminuirían si dieran la opción de poder disfrutar de un almuerzo degustación, donde pudieras hincarle el diente a cada bocata con ese pan crujiente recién terminado en su horno. Pero, como esa alternativa todavía no existe, he tenido que ir varias veces.

Carta de almuerzos

En cuanto al almuerzo la cosa pinta muy bien. 

En el puesto número uno me quedo con el bocata de carne de caballo (El Luisito), me flipa la mostaza antigua con la que lo sirven, le da un toque ácido que hace que mis papilas gustativas se pongan las pilas. La carne de caballo a pesar de ser un poco más gordita (en comparación con otros bocatas de caballo) se muerde muy bien, y eso my Friends, es porque en realidad es potro, lo que le confiere un sabor suave que combina a la perfección con los ajetes tiernos y las patatas panaderas. Nota: el jugo con el que va bañado todo el bocata en su interior es maravilloso. Os lo he dicho es mi NUMBER ONE de su carta.

El Luisito

No perdamos de vista su propuesta con sobrasada, cebolla y queso (Alboraya). Dos veces probado y dos veces me ha flipado. Os cuento un secreto, no puedo con el rulo de queso de cabra, pero no me preguntéis como lo hacen pero en comunión con el resto de ingredientes me ha encantado. Number TWO adjudicado.

Bocata Alboraya

Vamos con la tercera opción de «La Chata Ranking»: «La Cañada Poble» es us propuesta de bocadillo de chipirones encebollados en su tinta. Lo primero que piensas es: ¡ostras! este bocata está muy negro pero luego piensas, ¡Ua! este bocata es muy top. Este también lo he probado dos veces y tengo claro que no será la última. 

La Cañada Poblet

El de puntillas rebozadas alias «Celestino» ostenta el 4 lugar del clasificación, no porque sea desmerecedor de un primer puesto si no porque el de caballo me robó el corazón y como sin darme cuenta he empezado a escribir esta sección a modo ranking, y mira que no quería, he tenido que continuar con la trayectoria si no quiero tener que reescribirlo todo. El Chipirón es pequeño, con sabor a lo que toca, el rebozado no es pesado ni aceitoso, dentro del pan y con los otros ingredientes crea una buena sensación: ni seco ni aceitoso… más bien jugoso.

Celestino

Si tuviera que resumir el esmorzaret en la Chata Ultramarinos diría que me parece espectacular la carta de bocadillos, creo que tiene la medida y la variedad justa. Bocatas clásicos, bocatas más especiales, opciones veganas, vegetarianas y con productos del mar. Y una cosa que siempre se agradece es que aunque te pongas hasta las trancas no sales con una sensación pesada.

Antes de estos bocatas nos tomamos unos mejillones, el vino con gaseosa fue con un vinazo y de postre ya se sabe que se termina con un cremaet.

Cremaet

Curiosidades

La Chata y el Chato eran por un lado la abuela de Sergio y el abuelo de Clarisa. Sus abuelos, al igual que ellos, eran apasionados de la gastronomía, de la cocina y del buen comer. La Chata Ultramarinos recibe el nombre en recuerdo y honor a ellos.

 

 

Nos vemos en los bares

Siempre he pensado que almorzar en Ruzafa es complicado, igual me equivoco, pero hasta ahora los podía contar con dos dedos de la mano, ahora ya los puedo contar con tres. Mientras se alineen los astros para que pueda regresar a almorzar por el barrio me he llevado varias latas, quesos y vinos para tomar en casa.

Si os gustan los bocadillos reinventados, gourmet o de autor echadle un vistazo a los bares que os he dejado al pie de este post y si os derretís con los bocadillos de carne de caballo os dejo también mi Top List Bocatas Carne de Caballo.

La Mesedora

Intro

En hostelería se dice y se palpa que el oficio se está perdiendo, que ya no es como antes y que cuesta encontrar sitios donde los propietarios y el personal quieran hacer carrera en una profesión sacrificada y gratificante a partes iguales. 

Tras haber almorzado con Sergio, el pequeño de los 3 hermanos (Gerardo, Jaume y Sergio) impulsores de La Mesedora no puedo evitar pensar en que significa tener oficio, qué implica y cómo se traslada en la actividad del día a día de un bar o restaurante. 

Si nos ceñimos al significado del diccionario encontramos que la palabra «oficio» tiene dos acepciones:

I. Dominio o conocimiento de la propia actividad laboral.

II. Actividad laboral habitual, especialmente la que requiere habilidad manual o esfuerzo físico.

Yo me identifico sobretodo con la primera. Para mi el oficio no se limita únicamente en saber servir las mesas, bebidas y comidas, es más una actitud ante el trabajo, el producto y la profesión, una actitud cuyo objetivo es dar buen servicio acompañado de la propia satisfacción de estar haciendo las cosas de la mejor manera que uno puede y sabe.

Os cuento todo esto porque hablando con Sergio me di cuenta que para ellos es fundamental dar el mejor servicio posible, mejorar en cada aspecto relacionado con el negocio, innovar y modernizarse para mejorar los procesos, formarse constantemente para hacer que este proyecto nacido una semana antes del confinamiento de 2020 pudiera ser la continuación de todo el esfuerzo hecho por sus padres con su anterior restaurante.

El Esmorzaret

En La Mesedora llevan la experiencia del almuerzo un poco más allá, con propuestas de autor, menajes interesantes y digitalización.

Un buen almuerzo debe ir precedido de una picaeta. Aquí el arranque lo marcan unas buenas olivas aliñadas y/o normales (en ambos casos son carnosas y sabrosas) junto a unos cacaus pelados, fritos por ellos mismos y aderezados con cúrcuma y sal.

Tienen una amplia carta de bocadillos clásicos y de autor, como uno no sabe nunca cuando va a poder volver me fui directo a la sección Gourmet.

Me pareció brutal que tuvieran una propuesta con mero y muy interesante que lo pudieras terminar de condimentar al gusto con polvo de Cacau d’or. Sus brotes tiernos de mostaza y su tomate natural le dan un toque sano y fresco que me pareció maravilloso.

También probé «El Vegà», bocata 100% vegano a base de heura, patata, ajos tiernos, mayonesa de membrillo y queso vegano. La heura está rebozada y frita, la mayonesa le da un toque dulce y los ajos tiernos y la cebolla crispy le confieren texturas diferentes en cada mordida. Si queréis podéis echar un vistazo a la Bocata Review que hice de este bocadillo.

Menos mal que iba de la mano de Sergio y me dijo que no me podía marchar de su casa sin probar las patatas bravas de cheddar y bacon. Si hubiera ido por mi cuenta de incógnito no las hubiera probado y nunca hubiera sabido el tesoro que alberga ese plato en forma de patata gigante en el que las sirven. 

Por último le hinqué el diente a «El caballó», interpretación del bocata más icónico del almuerzo valenciano, un bocata de carne de caballo diseñado para que lo disfrutes mientras la yema del huevo empapa los finos filetes de la, sabrosa e intensa, carne de caballo. Si no vas con ojo la yema de huevo también puede recorrer tus dedos mientras mordisco a mordisco te terminas este mítico de los esmorzars valencians.

Os recomiendo ir en comboi y compartir varios platos para que podáis abarcar al máximo su carta. 

El Cremaet

En la parte del cremaet me voy a extender más de lo habitual porque hay bastantes cosas que contar en torno a la versión que han creado de este icono del esmorzaret.

 

Su afán por mejorar e innovar les ha llevado a desarrollar un peculiar cremaet de autor, no solamente por el aspecto hipnótico y atrayente que le confiere el colorante de «polvo de Oro» si no por la mezcla de distintos alcoholes que han formulado hasta crear un cremaet brutal.

Un cremaet sin un buen café puede estar bueno pero estará mejor si el café está a la altura de tal manjar. Sergio me dio una master class entorno al café que utilizan, porque lo utilizan, las proporciones de mezcla de arábica y robusta, y porque sus máquinas de café están a medio camino entre las de hostelería y las de especialidad. Gracias a la pasión de Jaume y Sergio por el café han encontrado un equilibrio entre: Dar un buen café controlando variables de la máquina (cosa que las de hostelería convencionales no permiten) y poder atender con rapidez los picos de demanda de cafés en hora punta.

Y hablando de cremaets, me dieron a probar un postre que voy a recordar como el mejor tiramisú de cremaet que he probado. Mar, pareja de Sergio, es la artífice de tal maravilla. Yo no soy mucho de tartas y menos de terminar el esmorzar con un postre dulce, pero este tiramisú me ha roto los esquemas. Es ligero, esponjoso y de sabor brutal, el único problema es que no te das cuenta y te lo has terminado, creo que debería estar prohibido.

El Espacio

Está ubicado en el polígono de Algemesí. Es un local de corte actual con un amplio salón interior y una buena terraza. 

Es fácil llegar y aparcar. 

Curiosidades

La Mesedora además de ser un restaurante también es un hotel. En la planta de arriba disponen de algunas habitaciones disponibles para pernoctar.

Sin duda tienen las camareras más modernas de la ciudad y de la Comunidad Valenciana, Mese y Dora a pesar de que son sus empleadas más silenciosas y tranquilas no pasan desapercibidas entre todo el jaleo de la sala.

Nos vemos en los bares

Da gusto encontrar proyectos en los que hay mucha pasión, esfuerzo y ganas de hacerlo bien. Te sentirás más identificado o menos con las maneras de hacer pero lo que es indiscutible es que La Mesedora es un buen sitio para almorzar, es un sitio que no te va a dejar indiferente y si eres de aquellas personas que les gusta probar debes ir catar su propuesta. 

Si no sabéis como llegar echadle un vistazo al Mapa Esmorzaret.

Os dejo otros sitios regentados por gente joven, con ganas y con propuestas que empujan el esmorzaret al siguiente nivel.

MESON CANELA

Intro

Sin duda uno de los descubrimientos de este 2022. Negocio familiar abierto hace 60 años por “El Canela” junto a su yerno. Ahora Miguel, tercera generación, se pone al frente para continuar con la tradición familiar.

Para amantes de la oreja a la plancha, los productos traídos del pueblo, bocatas hechos al momento y bares familiares que pasan de generación en generación ya tenéis un nuevo bar que apuntar en vuestra lista de indispensables.

El Espacio

Ubicado en el barrio de El Calvari el Mesón Canela se encuentra en una esquina con un amplio chaflán, lo que le permite tener una terraza con sol y sombra.

El local es grande, con una barra en un lateral y una cocina medio vista, tiene un salón al fondo y una decoración en madera al estilo marinero. Respira un aire antiguo pero acogedor, su mobiliario me recordó al de la Cervecería Aquarium y a esos restaurantes de nivel de los años 70.

Por la decoración, por un rótulo que vi en el exterior y los acuarios llenos de anguilas y bogavantes deduje que una de sus especialidades son los platos marineros. De hecho quiero volver para probar su All i Pebre.

El Esmorzaret

Iba con el foco puesto en su oreja a la plancha y quizá probar algún bocadillo ligero, pero nada más entrar vi los jamones colgados, las anguilas en el acuario, unas aceitunas secas y negras en un bote y me di cuenta que de ahí iba a salir habiendo probado varias cosas y con las ganas de haber probado más.

Gasto

Hablé con Miguel y me dejé completamente en sus manos, lo único que le dije es que quería probar su oreja a la plancha, una vez fijadas las premisas arrancó el baile del almuerzo. La picaeta constaba de tres clases de olivas (unas dulzonas, negras y secas, otras con un toque picante y otras de sosa) y algunas guindillas (fundamentales en cualquier esmorzaret).

La Oreja me pareció espectacular, la sirven entera y su precio va a peso, la hierven y la pasan por la plancha y se queda con una textura maravillosa, crujiente por fuera y blandita por dentro, en algunas partes se nota la carne de la oreja que se alterna con el cartílago y el colágeno de la pieza. La sirven con una mayonesa de wasabi.

Yo no soy mucho de vino en los almuerzos pero Miguel me sacó una botella de la cooperativa de Ledaña, su pueblo. Mi estómago estaba un poco reacio a tomar una copa a primera hora de la mañana, así que únicamente lo probé y tengo que reconocer que para un almuerzo creo que maridaba a la perfección, era suave y muy agradable.

Tortilla con guarrillas

Lo primero en llegar fue un pinchito de tortilla con guarrillas, así llaman en su pueblo a un tipo de chistorra más curada que la tradicional, con ello consiguen que no sean tan pesada. La Tortilla, la cual estaba recién hecha, tenía un punto meloso que se mezclaba con unas patatas a medio camino entre la machacadas y a trocitos, hacía tiempo que no probaba una tortilla de este estilo. Creo que mis archivos de memoria me remontaron a alguna tortilla probada en Madrid cuando enfundado con mis trajes de financiero me escapaba a media mañana para almorzar.

Brascada

Por último, me recomendó su Brascada y menos mal que la probé porque es una de las mejores que he probado hasta la fecha, su carne era tierna y sabrosa, utilizan entrecot de lomo alto, lo que se traduce en una experiencia maravillosa porque no hay cosa que más rabia me de que llevarme la mitad del filete al morder un bocata. El pan era ligero y aireado (Del horno dels Desamparats del Mercado Central), el jamón serrano estaba cortado al momento y pasado por la plancha, el queso fundido y los huevos fritos eran como los de toda la vida con puntilla alrededor de la clara… que más se puede pedir.

El Cremaet

Si hay cremaet hay que probarlo, éste estaba hecho con ron, naranja y predomina el toque dulce.

Cremaet

Curiosidades

Algunos de los cuadros que hay en el restaurante fueron pintados por «El Canela» cuando se jubiló. 

Nos vemos en los bares

Descubrir este tipo de bares son los que me mantienen la llama encendida en esta aventura Bar Hunter, bares que tienen una historia detrás, que han ido adaptándose a los tiempos, que apuestan por propuestas gastronómica de toda la vida pensando en los productos del pueblo, con vinos de cooperativas, aceitunas de sus propios olivos, y con ganas de ofrecer una buena experiencia al comensal…

Escribiendo este post no he podido evitar acordarme de bares con una esencia similar, así que echadle un vistazo a los que os propongo en la sección de recomendados al final de este post.

CAFETERÍA MADRIGAL

Intro

Hacía mucho tiempo que iba en busca de un almuerzo vegano, muchas personas me han preguntado por opciones veganas en el universo de los almuerzos y la realidad es que casi no hay opciones más allá de pedir que te pongan en el bocata aquellas opciones de la vitrina que no llevan carne o derivados de animales. Además, el veganismo no pasa simplemente por no comer carne si no que es más una filosofía de vida y una manera de relacionarse con el entorno con lo que va mucho más allá de tener opciones sin carne en la carta.

Este sitio lo descubrí gracias a Raisa Gallegos, conocida en instagram como @veggie_vlc

El Espacio

La cafetería Madrigal está ubicada en el barrio de Ruzafa por la zona que da al Parc Central. Es un espacio pequeño, dónde puedes ver la cocina y con una terraza con sombrillas en la acera de la calle Puerto Rico.

El Esmorzaret

En cuanto a la propuesta para almorzar no es muy extensa pero lo que yo probé estaba muy bueno. Personalmente reconozco que a mí la comida vegana me flipa (de hecho muero por volver a probar un buen «Mapo Tofu» bien hecho) y el universo que se abre con este tipo de alimentación es muy amplio.

Me decanté por probar la tortilla de patatas, estaba hecha con masa de garbanzos y patatas al vapor. Era una tortilla consistente y completamente cuajada, estaba buena y nunca hubiera dicho que era de garbanzos, me hubiera gustado probarla también con las patatas fritas en vez de al vapor (un 10 por el hecho de que son más saludables). La tortilla iba acompañada de un pan integral sin gluten y con nueces, junto a tomate rayado y ajonesa sin huevo.

Por otro lado también probé su almussafes vegano, estaba muy bueno, creo que es el almussafes vegano más equilibrado que he probado. Hasta la fecha todas las sobrasadas veganas que he probado son muy ácidas y fuertes, en alguna ocasión me han dejado la boca resentida tras tomarlas, pero en este caso estaba todo, para mi gusto en su justa medida. Solo tengo que decir que si el pan hubiera sido de otra clase el bocata hubiera sido un espectáculo.

Para beber cambié el agua o el vino con gaseosa o la cerveza por una Kombucha, me encantó que hubiera diferentes opciones tales como batidos, zumos y kombucha para almorzar.

Despedida

Tengo algunos otros sitios veganos en mi lista de futuros almuerzos, los iré visitando y compartiendo. Os dejo otro sitio por el barrio de Ruzafa que tiene opciones veganas y vegetarianas, La Cantina de Ruzafa.

Bar Cremaet

Intro

¿Bar Cremaet o Bar Mistela? ¿qué tiene de diferente el cremaet frente al mistela? Seguro que lo habéis pensado más de una vez y si no lo habéis hecho, os reconozco que a mi se me ha pasado por la cabeza…

Para hablar del bar cremaet es imposible no jugar al juego de las 4 diferencias con su hermano de Torrefiel. Así que ahí van mis impresiones entre estos dos titanes de los Gastro Almuerzos.

El Espacio

Tomando como inspiración la función y el uso mercante que se le daba a los “Camins del Grau” antiguamente han diseñado todo el espacio. Dispone de una buena terraza que ocupa buena parte de una plazoleta que tiene justo en frente. 

El espacio respira diseño en todos sus rincones, es moderno y muy cuidado. Tiene todos aquellos elementos icónicos de los bares de toda la vida, tales como barras de metal, mobiliario de madera, cristaleras rotuladas y dibujos a mano de los platos. Estando en Valencia y de camino al puerto no podían faltar referencias al universo de los azulejos.

El Esmorzaret

La carta de bocatas del Cremaet es diferente a la del Mistela, así que podéis ir tranquilamente a uno u otro que encontraréis cosas diferentes, ambas respiran el mismo estilo pero hay platos distintos. Dado que soy ultrafan del Top Musafes 2.0 del Mistela tuve que pedir el Top Musafes 3.0 del cremaet, ¿diferencias? básicamente que el Top 3.0 lleva un huevo frito que al apretarlo estalla la lujuria por todos lados mientras se va mezclando con la cebolla pochada, el bacon, el queso manchego y la sobrasada.

Si hay algo, que para mi, caracteriza al Mistela son sus TORREZNOS, y en el Cremaet le han dado una vuelta bestial y los han hecho a baja temperatura… y chicos, a mi, me molan más estos últimos, son más suaves, con una grasita que me recuerda a la de la panceta de los pucheros y un crujiente que combina a la perfección con la textura blandita del resto.

Los precios de los almuerzos son iguales en ambos locales. Puedes elegir entre 3 tamaños distintos.

El Cremaet

No me suelo mojar mucho con los cremaets porque para gustos colores pero a mi este me moló mucho y, además de bueno, me pareció maravillosa la presentación de los condimentos por separado sobre la cucharilla para que cada cual decida si volcarlos sobre el carajillo o disfrutar del elixir sin interrupciones flotantes, ¡up to you my Friends!

Curiosidades

Para decorar el espacio se han inspirado en los trenes de mercancías que recorrían la avenida camino al puerto, por ello se pueden encontrar materiales que recuerdan a los sacos de cereales, las vías del tren, etc etc etc

Nos vemos en los bares

Lo que está claro es que es un buen sitio para almorzar, buen producto, muy bien cocinado y con propuestas muy muy interesantes. No os he hablado de las Gildas, de su submarino (una marinera de toda la vida: rosquilleta con llavoretes, ensaladilla y anchoa), de su bocata de atún con piparras y de la millones de cosas que aún me quedan por probar, pero bueno algún día las probaré.

Solo tengo un “PERO”: sus Torreznos no están a la hora de almorzar ,  conmigo hicieron una excepción porque les supliqué que me los dejaran probar pero yo pienso que tal manjar debería estar en las horas de máximo hedonismo tradicional. Creo que habría que hacer un Change punto org para que los incluyan.

LA REVOLTOSA BAR

Bueno bueno bueno, 

Pocos son los post que arranco con los «buenos» pero es que La Revoltosa Bar se merece una ola y no solamente porque tengan buen producto para almorzar o porque intenten elaborar platos y bocadillos tomando como punto de partida la tradición gastronómica familiar y añadirles un punch extra, si no también porque es de esos sitios en los que uno se encuentra muy a gusto.

El espacio

Barra – La Revoltosa Bar

Local pequeño, decorado con tonos cálidos y acogedor. Tiene varias mesas dentro y una terraza pequeña con una combinación de mesas altas y bajas.

Las veces que he ido me hubiera pasado toda la mañana en su terraza, viendo como los vecinos se paran a hablar entre ellos y se preguntan sobre sus cosas (jóvenes y mayores), me flipa esa vida de barrio.

El esmorzaret

Os adelanto que su tortilla de patatas me ha llegado al corazón, ¿sabéis esas tortillas sencillas pero que tienen algo especial? El mundo de las tortillas es muy subjetivo y ya sabemos que no hay dos tortillas iguales pero resulta que esa tortilla me recordó a la que hacía mi abuela, esa que me encontraba “por arte de magia” en la mesa la tarde que iba a visitarla y, ya sabemos como funciona esto, aplicando la regla del “ya que está hecha” terminaba cenando aunque fuesen las siete de la tarde.

Esgarraet, Titaina y tortilla

Y como parece ser que la cosa va de tradición y abuelas, deciros que el bocata que me comí está inspirado en un plato que hace la yaya de Javi: “La Marmita de la Yaya”. Podríamos decir que es como una titaina de embutidos (chorizo, morcilla y longaniza) sobre una capa de patatas pochadas. Bocata de guiso, de sabor intenso, con toques a especias dentro de un pan crujiente y agradable.

Marmita de la Yaya – Bocadillo

Y para cerrar el post ahí va una ráfaga de impresiones: 

  • Su ensaladilla está brutal
  • Su esgarraet me lo fulminé en un plis-plas
  • Sus calamares rebozados me los comería como si fuesen palomitas.
  • Su cremaet es uno de los mejores que he probado en Valencia.
Cremaet – La Revoltosa Bar

 

Curiosidades

Javi llevaba unos años retirado de la hostelería, encontró por casualidad este local en pleno Cabanyal y decidió jugársela, cuando iba a abrir estalló la pandemia, aguantó el confinamiento y en cuanto pudo levantó la persiana.

La «Marmita de la Yaya» es un bocata inspirado en un plato que cocina su abuela, cada vez que lo guisa triunfa tanto que se hacen colas alrededor del perol en fallas, cumples o eventos familiares.

Otras recomendaciones

Si lo que os molan son los sitios de esmorzaret donde se funde la tradición con la innovación o con un aire un poco más moderno no podéis dejar de echar un vistazo a los posts de Alenar Bodega Mediterranea, Bar Mistela o El Trinquet de Pelayo.

BAR ASENSIO

Nunca había oído hablar del Bar Asensio, y mira que llevan 30 años abiertos. Hace unas semanas se cruzó una foto de un bocata nivel gourmet que captó mi atención, era del Bar Asensio. Al cabo de unos días vi otro bocadillo que me gustó ¿y sabéis de donde era? Del Bar Asensio también, la cosa estaba clara: el esmorzaret iba a caer en breve.

Rótulo Bar Asensio

El espacio

Está situado en una calle de Picassent al lado de la Plaza del Mercat, es un bar pequeño, reformado y con una terracita a pie de calle. Las mesas guardan la distancia covid de seguridad y cuidan mucho los protocolos.

El esmorzaret

Iba con la idea de probar para almorzar alguno de los bocatas que había visto pero al ver la carta he encontrado tal oasis de bocadillos gourmet que he pensado… «hoy no los voy a poder probar todos, así que Joan, déjate aconsejar...» y eso he hecho, Jose Vicente me ha dicho que el mítico del Bar Asensio para esmorzar es el de Carne de caballo, patatas a lo pobre, tomate seco y ajos tiernos.

Me he dejado en sus manos y he disfrutado muchísimo, la carne era finita como el papel, con mucho sabor y con ese jugo caramelizado que queda de la plancha (el otro día aprendí que se llama reacción de maillard), las patatas a lo pobre estaban en su punto, nada aceitosas y con buen sabor a patata, el tomate seco le daba un extra de sabor y sal que me generaba la necesidad de encontrar trocitos de tomate para que mis papilas se volviesen locas, los ajos tiernos le daban un punto de jugosidad perfecto y si a esto le sumas que el pan estaba muy bueno (aunque a mi se me ha roto un poco por manazas)… hoy he visto el cielo con este almuerzo.

bocadillo de Carne de Caballo

He disfrutado del gasto, por varios motivos, las aceitunas eran buenas y carnosas, los cacaus pelados con buen sabor y en su punto de sal y como extra había pimiento en salmorra con un ligero sabor a comino, de normal no se encuentra y cuando lo ponen se agradece muchísimo.

El cremaet está hecho con un ron de la zona, Ron Mariel, de la destilería Ríos (ubicada en Silla). Es un ron oscuro y con un sabor intenso un tanto característico al que no estoy acostumbrado.

Cremaet – Ron Mariel

Curiosidades

Los tomates secos los hace el «Torrentí», un vecino del pueblo que tiene una verdulería, él mismo los cultiva y los hace en conserva. Podrían utilizar cualquier tomate pero ellos prefieren el tomate de pera, la verdad es que le da un punto salino especial y muy rico.

La carne de caballo es espectacular, desde siempre han utilizado «la chulla», comúnmente conocido como entrecot, la filetean finísima con la cortadora y así con un «vuelta y vuelta» está hecho.

Despedida

Una de las cosas que más me ha gustado a parte del buen esmorzar es que trabajan con producto y proveedores de la zona, hoy he aprendido varias cosas que los tomates secos los hace el torrente y que hay una destilería en Silla que hace ron entre otros licores y eso señores y señoras es lo que me flipa de ir visitando y conociendo lugares donde hacen del almuerzo valenciano algo memorable.

Os voy a enumerar los bocatas que me han quedado pendientes: el de pollo con salsa de curry, el de chipirones con mejillones en escabeche, el de bacalao a la andaluza, el de carrillada, el chivito de secreto y el almussafes roast beef… me da que tendré que regresar al menos 5 veces para almorzar.

El ticket – Esmorzaret

BAR L’ABORDATGE

Introducción

En verano una de las cosas que más apetece son las terracitas, el mar, la playa, los amigos y cosas fresquitas, así que, como renunciar al almuerzo no es una opción posible, lo que hicimos fue mezclar todos esos factores y fuimos a almorzar al restaurante L’abordatge de la Pobla de Farnals.

«El esmorzaret es una tradición y un ritual. La cultura del almuerzo viene de cuando los agricultores hacían una parada a media mañana para comer algo y reponer fuerzas. A día de hoy, en Valencia, el almuerzo se ha convertido en toda una religión» .

El espacio

L’abordatge es un restaurante pequeño, decorado por dentro como si fuese un antiguo barco, con motivos náuticos y madera barnizada, donde sirven comidas, cenas y almuerzos.

Está situado al final del puerto de la Pobla de Farnals, en un pequeño complejo de locales donde se mezclan restaurantes y negocios de actividades acuáticas.

Tiene una terraza grande a la sombra que está dividida en dos espacios, una parte se encuentra bajo un toldo grande y la otra bajo un pasaje que hace el complejo de locales. Dentro del local hay unas cuantas mesas.

El esmorzaret

Llegamos sobre las 10h y la terraza estaba llena, buena señal, dado que no reservan estuvimos esperando un rato y tras unos 30 minutos conseguimos una mesa.

Lo primero que siempre hago al llegar a un local es echar un vistazo a su vitrina, y ¡bingo! el material tenía muy buena pinta… así que me senté y cuando vino el camarero le pregunté si tenían algún bocadillo estrella, me dijo que no pero que la carne de caballo estaba estupenda… así que ¡doble bingo! pedí uno de carne de caballo, patatas fritas y pimientos asados… y fue todo un acierto: el pan era crujiente y muy bueno, la carne fina y en su punto, las patatas me parecieron lo más, cortadas en rodajas, crujientes por los bordes y tiernas por dentro, los pimientos le daban un punto de jugosidad en el que contrastaba el toque dulce de los rojos con el más fuerte de los verdes.

Bocadillo de carne de caballo

Pedimos también una ensalada de tomate, tenía mejor pinta de lo que era, estaba bien pero no era como para soltar un ¡Brutal!. Los cacaus del collaret, pequeños y con mucho sabor y las aceitunas bien, una mezcla entre partidas y manzanilla.

Mis compañeros de esmorzaret se pidieron otros bocadillos, uno de ellos un clásico que no puede faltar en cualquier almuerzo: tortilla de patatas con longaniza. Mientras que el otro bocata haría la boca agua a cualquier amante de la carne: Revuelto de chistorra con unas longanizas extras.

En este comboi también venían niños, y me alegró ver como adaptaron el almuerzo a sus necesidades, sacaron unas tostaditas más blandas con tomate y jamón York a la plancha.

La cerveza en litrona y el agua en botella de litro, como dijo uno de los integrantes del comboi:

«Almorzar con una buena litrona le da un punto romántico al esmorzaret»

Y creo que tiene toda la razón, los aspectos costumbristas y desprovistos de glamour del almorsaret es lo que imprime la personalidad y autenticidad a este momento dónde el objetivo es disfrutar de la comida y de la compañía sin adornos ni florituras.

No tenían cremaet y nuestro gozo en un pozo, pero bueno, nos pedimos unos cafés y debo reconocer que me sentó de categoría, negro como el azabache y con espuma densa.

Café solo – L’Abordatge

Curiosidades

He almorzado en dos ocasiones en la Pobla de Farnals y en las dos ocasiones tenían en sus vitrinas chorizos criollos, en el primero no me llamó la atención porque estaba regentado por unos chicos de Uruguay pero ayer en L’abordatge también vi que los tenían, será coincidencia pero es un tipo de chorizo que no se suele ver en los surtidos del almuerzo valenciano.

Despedida

En verano el cuerpo me pide almorzar en sitios así, cerca del mar, con producto fresco y con amigos, de aquí a lo que queda de meses de calor voy a intentar que todos los almuerzos sigan este patrón. Así que si pensáis igual que yo y os apetece almorzar en un sitio costero os recomiendo que echéis un vistazo al post que hice sobre el Casino del Perelló.